3/6/11

  Puede ser una de las motos que nunca te hayas planteado comprar por su cilindrada, pero si buscas un producto deportivo a su justo precio, ten en cuenta este modelo. Hasta el momento no ha habido tanto equilibrio en una monocilíndrica entre lo que entendemos por utilitaria y deportiva la vez. Puede sonar a exageración, pero el rendimiento de su mecánica sorprende porque está muy alto para ser una mecánica de cuatro tiempos de un solo pistón.

   Honda está realizando una estrategia muy agresiva de todos los productos que están saliendo de la cadena de montaje de Tailandia. Esta fábrica trabaja a destajo para producir modelos de gran éxito de ventas, como lo es en nuestro país el PCX, un scooter líder de ventas absoluto desde principios de año que también muestra su equilibrio entre tecnología y el precio a pagar por ella. De allí también salen las CBR 125 R y la CBR250 R, motos que una vez más sorprenden por la calidad de sus acabados. Resta decir que el precio de nuestra protagonista está por debajo del de un scooter de prestigio como es el mismo Honda Scoopy (SH300) fabricado en Italia (Atessa) que en su versión equivalente con C-ABS (frenada combinada junto al ABS) se planta en 1.050€ más (490€ con la promoción vigente). Llama la atención, que el precio de esta moto de cuarto de litro se encuentre al precio de modelos del mercado de 125 de cuatro tiempos, unos con propulsores monocilíndricos y otros con bicilíndricos…



   No se trata de una moto de 125 inflada, sino una moto diseñada para ser una dos y medio, de ahí que se extraiga un comportamiento de buen calibre. 


Cuando la diseñaron se acordaron de que tenían que dar el toque de distinción estética que tienen toda la nueva gama Honda. Una mezcla entre la agresividad y la deportividad de la CBR1000RR y la polivalencia de la ya famosa VFR1000F que tanto ha gustado. Se ha encontrado el punto medio que pueda contentar a los usuarios que la quieren usar a diario para ir a trabajar como a los que le darán un uso más deportivo en los fines de semana.


  Lo cierto es que la estética es una apuesta segura al haber sabido escoger las características de ambas motos. Desde el faro que protagoniza el frontal hasta el colín y el escape casi calcados de la VFR. No es de extrañar ya que se supone que una de sus características será la comodidad tanto para piloto como para pasajero, a lo que ayudan las asas y el semimanillar por encima de la tija.

Aún no conocemos datos específicos sobre la parte ciclo pero por lo que se puede apreciar el chasis, la horquilla delantera convencional y el sistema de frenado es probable que se quede “algo corta” en este sentido cuando le busquemos las cosquillas con el puño del gas o entrando en curva. Aunque, eso sí, podremos disfrutar del utilísimo C-ABS. 

  Se ha optado por instalar un monocilíndrico cuatro tiempos de cuatro válvulas con refrigeración líquida de 249,3cm3. Un motor teñido de negro que nos dará hasta 24cv de potencia a 8500rpm para que disfrutemos todo lo que podamos. Una cifra que deja que podamos intuir el carácter económico que inunda cada detalle.   
  Desde Honda nos aseguran que podremos llegar a recorrer 350km sin repostar gracias a un consumo de 3,71l a los cien y el depósito de 13l.


  Puede que nos parezca una cifra bastante baja si tenemos en cuenta que motos como la VTR 250 la superan sin problemas y que hasta una 125 cuatro tiempos puede acercarse a ella.




Precio de venta: HONDA CBR250 R C-ABS 4.499 €

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